¿Cómo busca agua un Zahorí?

¿Qué es un Zahorí y qué hace?

Un zahorí, conocido como «buscador de aguas subterráneas u ocultas«, se identifica como un individuo dotado de una sensibilidad única para detectar corrientes subterráneas de agua. Además, poseen la habilidad de hallar minerales, incluyendo oro y petróleo, y descubrir objetos extraviados o tesoros sepultados. Esto lo logran a través de la radiestesia, una técnica que implica el uso de herramientas como varillas de metal, bastones o varas de madera, y péndulos. Estos instrumentos les orientan en su búsqueda de agua mientras recorren la superficie de un terreno.

Definición de Zahorí según el Diccionario de la Lengua Española

  1. Persona que se le reconoce la habilidad de desentrañar lo escondido, principalmente manantiales subterráneos.
  2. Individuo agudo y detallista, capaz de descifrar o intuir con facilidad lo que piensan o sienten los demás.

Los zahoríes, además de afirmar poseer una habilidad especial para localizar fuentes subterráneas de agua, también alegan poder determinar el volumen, la calidad para beber y la profundidad del agua hallada.

La técnica utilizada por un zahorí para la búsqueda de agua es la radiestesia. Esta sostiene su eficacia en fundamentos psicológicos, atribuyendo los movimientos de los utensilios al fenómeno ideomotor. Esto implica que, por sugestión o autoengaño, a menudo de manera inconsciente, el zahorí experimenta ciertas reacciones mientras busca agua. Esto es lo que afirman diversos geólogos e ingenieros de minas.

Existe la creencia de que los zahoríes poseen dones o capacidades especiales que les permiten detectar una radiación misteriosa emitida por el agua subterránea. Se piensa que bajo la superficie terrestre hay una red de corrientes o manantiales de agua, y que los zahoríes tienen la sensibilidad o el poder para percibirlos.

En realidad, la mayoría del agua subterránea en la Tierra se encuentra almacenada en los poros de rocas y sedimentos, actuando como una esponja. Esto contrasta con la creencia de algunos zahoríes, que sugieren que con un palo o alambres se pueden localizar pequeñas corrientes o ríos subterráneos que convergen en un punto específico de un terreno (exceptuando las rocas impermeables, donde el agua circula y se acumula en zonas de fracturas, como en los granitos).

Si el agua subterránea estuviera ubicada únicamente en áreas muy específicas y no a pocos metros de estos puntos, las raíces de las plantas perecerían al no poder acceder al agua presente en el subsuelo. Esto contradice la realidad, donde el agua se infiltra debido a la porosidad de los materiales, distribuyéndose de manera más amplia bajo la superficie.

Radiestesia: Concepto y Práctica en la Búsqueda de Agua

La radiestesia, también conocida como rabdomancia, es una práctica que no cuenta con respaldo científico. Se fundamenta en la idea de qué estímulos como los eléctricos, electromagnéticos, magnéticos y radiaciones emitidos por un objeto pueden ser captados, y en algunos casos manipulados, por una persona, a menudo referida como zahorí. Esta percepción se lleva a cabo con la ayuda de dispositivos simples, que actúan como detectores de agua caseros. Estos artefactos, cuando se les aplica movimiento, son muy inestables, como un péndulo, varillas, horquillas en forma de V, alambres flexibles, entre otros.

La radiestesia es una técnica con miles de años de historia. La palabra deriva del griego «rabdos» (vara) y «manteia» (adivinación), lo que sugiere su uso original en la búsqueda de agua subterránea con una vara. Además de la vara, se emplean otros utensilios como alambres o péndulos para detectar corrientes de agua subterránea, petróleo y varios tipos de minerales.

Esta disciplina también encuentra aplicación en campos como lo espiritual y la salud.

Método Zahorí en la Detección de Aguas Subterráneas

El método zahorí para la localización de agua subterránea ha permanecido casi inalterado a lo largo de milenios. La práctica zahorí se originó en antiguas civilizaciones como Egipto y Mesopotamia, y ya era conocida en China hacia el año 2600 a.C. A lo largo de la historia, se han documentado numerosos estudios y crónicas sobre esta técnica.

Los zahoríes, expertos en la búsqueda artesanal de agua, requieren un profundo conocimiento de la naturaleza y las características del suelo. Deben analizar los materiales presentes en el terreno, su relieve y vegetación, buscando indicios de la presencia de aguas subterráneas.

Para detectar agua, el zahorí utiliza herramientas como péndulos, horquillas o varillas de alambre de cobre. Sostiene estos instrumentos con las manos extendidas hasta que, aparentemente por una atracción misteriosa, se mueven. Se cree que este movimiento ocurre en los lugares donde hay aguas subterráneas.

Más allá de la casualidad, la habilidad de los zahoríes para encontrar agua subterránea no se debe tanto a poderes especiales o a sus herramientas, sino a la observación detallada del terreno. El conocimiento sobre la ubicación de pozos existentes y los tipos de rocas (como calizas o areniscas, más propicias para almacenar agua que margas, arcillas o granitos) es crucial, así como el reconocimiento de la descomposición de rocas o la presencia de fracturas.

En cuanto a la remuneración, los zahoríes pueden variar desde no cobrar nada hasta solicitar cantidades modestas de dinero. Es común encontrar uno o varios zahoríes en cada comunidad o pueblo.

Zahoríes: Entre la Creencia y la Ciencia

Aunque las prácticas zahoríes se remontan a más de 5.000 años atrás en civilizaciones como Mesopotamia y Egipto, en la actualidad no existen evidencias científicas que validen la efectividad del método zahorí. Este se considera una pseudociencia, más cercana a creencias mágicas que al rigor científico. Esto lleva a muchos a cuestionar la veracidad de la capacidad de los zahoríes para detectar agua subterránea.

Para aquellos que se preguntan si los zahoríes realmente poseen habilidades especiales para detectar agua usando varillas de radiestesia u otros instrumentos, la respuesta científica actual es que el método zahorí carece de fundamentos científicos.

En épocas pasadas, la relación entre zahoríes y la detección de aguas subterráneas pudo haber tenido algún sentido práctico. Sin embargo, en la actualidad, existen métodos científicamente validados para la búsqueda de aguas subterráneas, como los estudios hidrogeológicos y métodos geofísicos.

A pesar de la falta de evidencia científica, muchas personas continúan creyendo en los zahoríes, confiando plenamente en sus indicaciones para la perforación de pozos. Esta fe a menudo lleva a acciones como la eliminación de árboles o edificaciones para ubicarse en un punto específico indicado por el zahorí, basándose en la creencia de que los manantiales de agua pasan exactamente por ese lugar, una noción que es geológicamente inconsistente.

El éxito prolongado de la teoría zahorí podría atribuirse a su simplicidad y fácil comprensión. La justificación se centra en que el instrumento utilizado (vara o péndulo) sería el responsable de detectar la presencia de agua subterránea mediante alguna forma de energía, magnetismo o resonancia. Los zahoríes serían simplemente portadores de la sensibilidad necesaria para percibir esta atracción.

Esta creencia se sustenta en la incertidumbre y el desconocimiento acerca de lo que se encuentra bajo la superficie del suelo, fomentando la fe en esta técnica para la búsqueda de agua subterránea.

Sin embargo, esta teoría parte de una premisa errónea desde su inicio. Una varilla o péndulo, así como la persona que los maneja, no poseen ningún tipo de energía o poder de atracción hacia el agua. En realidad, es el zahorí quien mueve, consciente o inconscientemente, el instrumento en la superficie.

Herramientas Utilizadas por un Zahorí en la Búsqueda de Agua

Los zahoríes emplean diversas herramientas para detectar agua subterránea, cada una con características y formas de uso específicas:

  1. Horquillas o Palos de Madera: Estas se conforman generalmente con ramas en forma de «Y», a menudo hechas de madera de olivo o de árboles típicos de la zona. Las consideradas de «mejor calidad» suelen ser de madera de sauce. En manos de un zahorí, estas horquillas pueden ejercer una fuerza hacia el suelo, como si atrajeran hacia un imán, o una fuerza hacia arriba, opuesta a la superficie terrestre, similar a la repulsión de polos opuestos. Los zahoríes afirman sentir una fuerza en sus manos, que los empuja hacia el suelo o en dirección contraria, dependiendo del detector de agua. Para que sean efectivas, deben usarse en movimiento, caminando.
  2. Péndulos Zahorí: Fabricados de metal o roca, comúnmente cuarzo, estos péndulos se suspenden de una cadena. Según los zahoríes, cuanta más velocidad o rotación tenga el péndulo, mejor será el manantial de agua detectado. Al usar un péndulo para buscar agua, el zahorí permanece estático, permitiendo que el péndulo actúe como detector de agua.
  3. Varillas de Radiestesia: Generalmente construidas de metal, como el cobre, estas varillas pueden presentar formas en «Y» o en «L». Para su funcionamiento, el zahorí debe estar en movimiento, caminando por el campo. Al detectar lo que denominan veneros o napas de agua, las varillas se cierran y vuelven a abrirse al alejarse de la fuente de agua.

Cada una de estas herramientas se comporta de manera distinta y, según la creencia de los zahoríes, responden a presuntas fuerzas o energías subterráneas relacionadas con la presencia de agua.

herramientas de un zahorí

Métodos Científicos para la Detección de Aguas Subterráneas

La presencia de agua subterránea en un área depende fundamentalmente de las características geológicas del subsuelo. Para que el agua se infiltre, es necesario que encuentre rocas o materiales permeables, así como rocas impermeables que retengan el agua a cierta profundidad. Por lo tanto, la identificación de agua subterránea requiere el estudio de las propiedades geológicas del terreno utilizando técnicas científicas.

Entre los métodos técnicos y científicos para localizar aguas subterráneas, se destacan:

  1. Estudios Geológicos: Analizan la permeabilidad de rocas y sedimentos, así como el estudio de escorrentías.
  2. Análisis de Fracturas: Realizados mediante fotografías aéreas.
  3. Estudios de Vegetación y análisis por satélite de factores como el NDWI (Normalized Difference Water Index) y NDVI (Normalized Difference Vegetation Index).
  4. Tomografía Remota Térmica del subsuelo.
  5. Cartografía Geológica: Proporciona una visión detallada de la composición geológica de un área.
  6. Métodos Geofísicos: Incluyen el uso de georradar, resonancia magnética protónica, y la medición de la resistividad eléctrica del suelo.

Los métodos más utilizados por su eficacia, rigor científico y coste relativamente bajo son el estudio hidrogeológico y el estudio de geofísica eléctrica. Estos combinan diversas técnicas mencionadas anteriormente y requieren un análisis más detallado para su correcta aplicación.

Estudio Hidrogeológico

El estudio hidrogeológico se fundamenta en técnicas que evalúan las características geológicas del terreno, como la composición y permeabilidad de las rocas. Incluye análisis geomorfológicos, estudios de los flujos de agua subterránea, análisis de la vegetación, y la tomografía remota térmica. Este método facilita la localización de los puntos óptimos para el sondeo, incrementando las probabilidades de encontrar aguas subterráneas.

Las principales ventajas de realizar un estudio hidrogeológico son la capacidad de estimar la probabilidad de existencia de agua subterránea y determinar la profundidad de perforación a un costo accesible. Se recomienda realizar estos estudios antes de invertir en la plantación de cultivos en un terreno, para conocer de antemano las posibilidades de acceso al agua.

Estudio de Geofísica Eléctrica

Entre los diversos métodos de geofísica para determinar la presencia de agua subterránea, el estudio de geofísica eléctrica se destaca por su completitud y alta efectividad. Permite identificar las diferentes capas del subsuelo, su profundidad, la presencia de fracturas, fallas y otros accidentes tectónicos. Su función principal es detectar la resistividad de los materiales y estructuras, lo cual es fundamental para la planificación de obras de captación de aguas subterráneas.

Un estudio de geofísica eléctrica mejora significativamente las posibilidades de encontrar aguas subterráneas y ofrece información detallada sobre la profundidad, el mejor punto de captación, y características como el contenido de sal del agua.

Las grandes ventajas de este método científico de prospección geofísica incluyen su capacidad para cubrir extensas áreas a un costo razonable y su mínima invasividad en la superficie del suelo, evitando cualquier daño.

Comparativa entre Métodos Científicos y Método Zahorí para la Detección de Aguas Subterráneas

La credibilidad del método zahorí se alinea con otras prácticas consideradas pseudociencias, como la astrología, la homeopatía o la numerología. Estas prácticas, incluido el zahorismo, carecen de evidencia científica y se asocian más con creencias mágicas o cuestiones de fe.

Es cierto que en algunas ocasiones los zahoríes aciertan en la localización de aguas subterráneas, pero según la ciencia, este acierto no se debe a sus técnicas. Más bien, se atribuye a la estadística de la presencia de agua subterránea en el subsuelo y, en algunos casos, a la observación y conocimiento de los terrenos donde ya se han realizado perforaciones. Estos terrenos pueden ofrecer pistas visibles sobre la existencia de agua. Sin embargo, estas circunstancias no son la norma, y la manera más confiable de localizar agua subterránea es mediante la aplicación de técnicas científicas.

En resumen, para propietarios o compradores de terrenos interesados en determinar la presencia de aguas subterráneas, existen principalmente dos opciones. Por un lado, está el método zahorí, que a menudo resulta en una pérdida de tiempo y recursos. Por otro, están los métodos científicos, que, a pesar de sus limitaciones, ofrecen resultados considerablemente más fiables y completos. Estos últimos deben ser la elección preferente para quienes buscan una evaluación precisa y basada en evidencia.

Preguntas Frecuentes sobre la Detección de Aguas Subterráneas

  1. ¿Qué es el método zahorí?

    • El método zahorí es una práctica antigua que supuestamente permite detectar agua subterránea utilizando herramientas simples como varillas, péndulos o horquillas. Se considera una pseudociencia, ya que no tiene respaldo científico.
  2. ¿Los zahoríes realmente pueden encontrar agua?

    • Aunque hay casos en los que los zahoríes han encontrado agua, no hay evidencia científica que demuestre que su éxito sea más que casualidad o conocimiento previo del terreno.
  3. ¿Cuáles son los métodos científicos para encontrar agua subterránea?

    • Los métodos científicos incluyen estudios hidrogeológicos, geofísica eléctrica, análisis de resistividad del suelo, tomografía remota térmica, y otros estudios geológicos y geomorfológicos.
  4. ¿Es costoso realizar un estudio hidrogeológico?

    • Aunque puede variar, los estudios hidrogeológicos generalmente son asequibles y ofrecen una estimación fiable sobre la existencia y profundidad de las aguas subterráneas.
  5. ¿Puedo confiar en un zahorí para encontrar agua en mi terreno?

    • Dado que el método zahorí carece de fundamentos científicos, es más recomendable optar por métodos científicos para una evaluación precisa.
  6. ¿Cómo funciona la geofísica eléctrica en la búsqueda de agua subterránea?

    • La geofísica eléctrica utiliza la resistividad del suelo para identificar diferentes capas subterráneas, incluyendo la presencia de agua, basándose en las propiedades eléctricas de los materiales.
  7. ¿Es mejor el método zahorí o los métodos científicos?

    • Los métodos científicos son preferibles debido a su base en evidencia y resultados probados, a diferencia del método zahorí que se basa en creencias y no tiene respaldo científico.